Tan profunda la tristeza y el dolor que llevo acá no me dejes, no te dejes, vos estás para algo más
La vergüenza cae en mi pecho alimento de mi puta sobriedad la arrogancia es mi condena. Mi ignorancia, consecuencia de una causa no muy justa
Pero esta vuelta no es de mí que voy a hablar es la historia de una madre que con dolor debo llamar Patria que por cruel y por avara, crió hijos despechados despiadados, deshonestos y que algunos quedaron huérfanos
No hay comentarios:
Publicar un comentario